Dios en su perfecto amor eligió a la Santísima Virgen María para dar a luz Jesucristo nuestro salvador, y muchos preguntaran y ¿por qué eligió a esta mujer?, pues existen muchas razones para elegirla a ella, y una de esas son sus virtudes.
Según el tratado de la verdadera devoción a la Santísima Virgen de L. Monfort, las principales virtudes de la Santísima Virgen son diez y la primera es su humildad profunda.
Alguno de los ejemplos de la humildad de María fue cuando le dio el SI a Dios en el momento que el Arcángel San Gabriel le anuncio el nacimiento de Jesucristo, lo podemos ver en Lucas 1,38 “María dijo: Aquí está la esclava del Señor; hágase en mi según tu palabra”, en este momento ella acepta ser la madre de Dios Hijo.
Y ahora preguntaran como poder seguir este ejemplo de la humildad de María, pues primero cabe resaltar que la humildad es lo contrario a la soberbia, sabemos que todos los seres humanos tenemos miles de defectos, preocupaciones y debilidades, pero podemos ser más humildes reconociendo que muchas veces no podemos solos, y necesitamos la ayuda de Dios, que debemos dejar el rencor, que podemos perdonar.
El libro Misteriosa Humildad indica que para empezar a hablar de la humildad tengo que ver en qué aspectos soy soberbio, que la humildad es el cimiento de todas las virtudes y sin humildad no puede haber obediencia y pureza. Adicional a esto, para pedir cualquier virtud debo conocerla, amarla y anhelarla.
Otro ejemplo de la humildad de la Santísima Virgen es cuando va a visitar a su prima Santa Isabel, con el fin de servirle a ella y no ser servida, esto a mi parecer es un gran modelo a seguir, y en la siguiente imagen podemos ver unas palabras de Teresa de Calcuta una gran servidora de Dios.
Ser humilde también es poder morir a esas cosas que a Jesús no le agradan de ti, poder reconocer que la embarras y que necesitas del perdón de él, así te duela dejar ciertas cosas o personas, debes saber que primero esta Dios, como lo indica Mateo 6,33 “Buscad primero el reino de Dios y su justicia, y todo eso se os dará por añadidura”.
Por último, la Virgen María acepta ser la madre del hombre cuando Jesús se lo indica, y desde ese momento ella nos guarda e intercede antes Dios por nosotros, a TI querido amigo que de pronto no tienes a tu mamá cerca, ya sea porque falleció, porque vive lejos, o porque nunca la conociste, te comento que puedes llamar a María quien te arrullará como su bebe consentido, que te dará calma, amor y jamás de desamparará.
Por: Andrea Sánchez Mora - Hope
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